Aparentemente parece difícil utilizar el musgo preservado, pero os aseguro que nosotros hemos conseguido crear un letrero verde que ha entrado con fuerza en nuestra oficina.
¿Dónde comprar el musgo preservado?
Ahora es posible comprarlo on-line, o también podéis preguntar a vuestro florista de confianza. La compra para nuestro letrero fue de unos 100 euros, pero estoy seguro de que los precios varían según la calidad.
Podéis comprarlo en amazon.es c buscando “musgo preservado” o preguntando a expertos que os hagan un presupuesto según vuestro proyecto. Algunas web son mosstrend.com, greenhabitat.it pero existen muchas otras, sólo tenéis que buscarlas en Google.
Nosotros lo compramos en “Gaetano el florista”, toda una institución en nuestra zona en todo aquello que tiene que ver con la jardinería.
¿Cómo poner el musgo?
Después de ver varios tutoriales, llegamos a entender que era necesario pegarlo con Vinavil o colas parecidas.
Empiezo desde 0. Unos días antes preparé el marco de unos 2 metros de largo, aproximadamente, y puse detrás la madera que sirve de base para el musgo.
¿La cola vinílica es suficiente? En algunas partes, donde el musgo pesaba más, hemos tenido que aplicar unos pequeños ganchos con una especie de grapadora.
¿El resultado?
Diría que estupendo. Fue un trabajo de equipo por el tiempo que se ha necesitado para seleccionar y pegar el musgo a la madera. El marco fue útil porque notamos que actúa como un recipiente para toda la capa de musgo.
¡Un buen artículo se escribe de manera sencilla y clara!
¡Un buen artículo se escribe de manera sencilla y clara!
¿Qué hemos aprendido?
Lo bonito de escribir para la web es que tienes que identificarte con el posible lector. Hay que preguntarse: ¿el artículo es interesante? ¿Es coherente? ¿Ayuda a resolver un problema?
Para evitar hacerse demasiadas preguntas, os sugiero algunas de mis reglas:
- Utilizar un título eficaz y no engañoso (eso, dejémoslo a los periodistas “atrapa click”);
- Dividir el texto en capítulos, como si fuera un cuento. Esto ayuda a que la lectura sea más cómoda;
- Incluir imágenes relacionadas para implicar aún más al lector;
- ¡Dar soluciones! Te habrás fijado en los links para comprar el musgo.
Ahora, el letrero está colgado en la pared más grande de nuestra oficina y queda genial.